Si NO haces esto para comunicarte tu empresa será una más del montón
¿Por qué algunas empresas consiguen ser un referente a pesar de ser similares a otras en lo que hacen, precio y calidad?
Si tienes un negocio o lo diriges lo más probable es que ya te hayas dado cuenta de que para ser un referente no basta con dejarte la piel trabajando mil horas. Seguro que en más de una ocasión te has preguntado qué errores de comunicación estás cometiendo a la hora de invertir en un vídeo o incluso por qué a otras empresas o proyectos, que no son mejores ni muy diferentes en lo que hacéis, ni tampoco invierten más que tú en comunicación o publicidad, les va tan bien y cada vez tienen más clientes fidelizados…
¿Por qué sucede?
Quizás tengas la respuesta dentro de esa misma pregunta…
La clave está en responder a “el porqué”
Tener errores de comunicación les ocurre incluso en las principales compañías del mundo. Tienen acceso a los mismos fabricantes, a los mismos recursos, a las mismas agencias, a los mismos consultores y a los mismos medios de comunicación. Sus productos no son la razón por la que la empresa sea percibida como superior. La clave está en que sus productos son la prueba tangible de un PORQUÉ. Eso es lo que las convierten en “únicas”.
Cuando estás al frente de una empresa, normalmente te centras en responder dos preguntas:
1 > ¿Qué haces?
2 > ¿Cómo lo haces?
Todo empresario sabe responder a eso, ¿verdad?
Sin embargo, uno de los secretos de las grandes marcas, y de las pequeñas que triunfan, es que logran comunicarnos el por qué lo hacen. De una forma u otra, nos traspasan su ilusión, sus sueños, sus objetivos. Nos cuentan por qué se levantan cada mañana y por qué a ti también debería importarte. Despiertan nuestras emociones y nos ponen la piel de gallina con cada anuncio y con cada historia que cuentan.
El porqué no es por tanto ganar dinero (ahí están los errores de comunicación), eso se sobreentiende y es una consecuencia de lo que haces. Es la razón por la que es importante que tu marca exista ¿necesitas llegar más allá? ¿sacar un nuevo proyecto adelante y que tus clientes o socios confíen en ti? ¿buscas ese sentimiento de pertenencia y orgullo con lo que hace tu empresa o con lo que es?.
El secreto de su éxito está en la estrategia de storytelling que siguen: No es una cuestión de marketing sino de saber contar historias.
Existe un patrón de comunicación común en las marcas más inspiradoras del mundo, que resulta que es justamente opuesto al que siguen el resto de empresas y marcas del montón.
La mayoría de marcas y empresas del montón cometen los siguientes errores de comunicación: comienzan la casa por el tejado. Es decir, cuentan primero «qué hacen», después «cómo lo hacen», y al final «por qué lo hacen», si es que llegan a contarlo ya que muchas no saben responder a esa pregunta.
Sin embargo, las marcas que son la leche y que han llegado a convertirse en referentes, comunican al revés: desde los cimientos hacia el tejado. Es decir, primero cuentan su «porqué«, de ahí pasan al «cómo», y por último cuentan «qué hacen».
Sin un porqué no tienes autenticidad como empresa y pasas a ser percibido como una marca más del montón.
¿Y qué relación tiene todo esto que te cuento con los vídeos y las historias? ¡Toda! Por lo mismo que te he contado anteriormente de comunicar al revés. El vídeo es la punta del iceberg, lo que se ve y la mayoría de empresas del montón contratan vídeos comenzando por el tejado, sin estrategia, para centrarse en contar el qué hacen y por lo que acaban obteniendo pocos resultados o ninguno. Son los errores de comunicación más comunes y que más caro cuestan a las empresas.
Para triunfar con un vídeo se necesita una estrategia de comunicación, lo que importa es lo que no se ve pero se siente y la mejor forma de mostrarlo es contando una historia.
Cuando presentas tu empresa por lo QUÉ haces, conviertes el precio, la calidad y las prestaciones de tus productos o servicios en las razones para decidir la compra. Te muestras como un bien de consumo por lo que te expones a ser metido en el saco de las marcas del montón con la presión de tener que estar compitiendo siempre por ser mejor, más barato o diferente a las demás y así destacar y que te elijan. Y a partir de ahí los errores de comunicación van en cadena.
De lo contrario, si comienzas tu discurso por el PORQUÉ, todos aquellos que se sientan identificados con ese propósito desearan incluir en sus vidas aquello que haces. No porque seas mejor, sino porque sentirán anidad con tu marca y percibirán tus productos o servicios como formas tangibles de mostrar a los demás aquello en lo que también creen.
Esto es importante porque está comprobado que todos confiamos en aquellos que percibimos con unos valores o creencias comunes a nosotros.
Te dejo un ejemplo que hice en 2013 para Manuel, Chef y dueño de un restaurante, y que a día de hoy lo siguen mostrando como un referente en lo que hace. En su historia vas a descubrir rápidamente ese PORQUÉ del que te hablo.
Por tanto,
Vuelvo a insistir que el vídeo sólo es la punta del iceberg, lo que se ve pero que es fruto de todo lo que está oculto. Y que tener un concepto creativo dentro de una estrategia que llame la atención te ayudará a encontrar el camino para saber qué quieres contar, cómo lo quieres contar, cuándo lo quieres contar, a quién se lo quieres contar o dónde lo quieres contar pero recuerda que lo importante aquí es partir del porqué.
No obstante, si también te pasa, puedes ver este vídeo donde explico paso a paso todo lo que debes saber para que conozcan perfectamente quién eres y qué es lo que haces.
Si quieres tener un vídeo así, como el que acabas de ver, para tu proyecto o empresa puedes contactarme aquí: